Una chica escribe en su muro: "tengo hambre, te puedo comer la boca?".
Las respuestas de los hombres son obvias, torpes, previsibles. "Sí, cómo no!!", "Si con eso se te pasara el hambre viviría chapando", etc.
Mi respuesta, como era de esperar, fue otra: "No, la necesito para muchas otras cosas".
También, como era de esperar, ese fue el único comentario que ella se tomó la molestia de contestar.
A veces me exaspera lo pelotudos que son mis congéneres.
1 comentario:
Jejeje, muy buena respuesta y además propia de ti.
Tus congéneres y las mías, a veces son desesperantes.
Sk
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