La única forma de salir de un laberinto es elevándose. ¿Será eso a lo que llaman disociación, mirar las cosas desde afuera? ¡Pero claro! ¿Cómo no me di cuenta antes? Hay que saber elevarse. Eso es todo.
No sé. Si elevarse significa relativizar o tomar distancia, sí. Dar un paso atrás y ver desde una perspectiva más objetiva ayuda mucho. Elevarse sin más me parece imposible y poco realista. Los laberintos también se pueden resolver desde dentro. No sé, yo soy de las que aprenden a base de errores y perdiendome por el camino. Cosa que de por sí desgasta bastante y ese mismo cansancio, toda la carga que se acumula, es la que te obliga luego a elevarte y mirar desde arriba. Pero no sin antes haber conocido el laberinto por dentro.
Es que por lo general no lo estoy. Pero puedo llegar a encabronarme muchísimo. Ese es mi lado jodido. Y por eso es un mecanismo que trato de desactivar cuanto antes, porque sé que me puedo ir a la mierda.
10 comentarios:
Me gusta el nuevo luc.
No sé. Si elevarse significa relativizar o tomar distancia, sí. Dar un paso atrás y ver desde una perspectiva más objetiva ayuda mucho. Elevarse sin más me parece imposible y poco realista. Los laberintos también se pueden resolver desde dentro. No sé, yo soy de las que aprenden a base de errores y perdiendome por el camino. Cosa que de por sí desgasta bastante y ese mismo cansancio, toda la carga que se acumula, es la que te obliga luego a elevarte y mirar desde arriba. Pero no sin antes haber conocido el laberinto por dentro.
Bien, es bueno saberlo.
No estaba muy convencido, en realidad.
De lo que sí estaba convencido es de que el otro era espantoso.
Sk, elevarse significa tener perspectiva.
Yo no he podido resolver un laberinto desde adentro jamás.
Estando adentro puedo desbordarme, y a mí los desbordes me ponen muy nervioso.
No te imgaino nervioso, Jay.
Es que por lo general no lo estoy.
Pero puedo llegar a encabronarme muchísimo.
Ese es mi lado jodido. Y por eso es un mecanismo que trato de desactivar cuanto antes, porque sé que me puedo ir a la mierda.
Bienvenida, niña.
Gracias.
Qué bueno que tengas tu propio blog. Me gusta.
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