lunes, 23 de mayo de 2011

Valparaíso


Una de las cosas que me gustan de volver a ver fotos viejas es la ilusoria cercanía que puedo tener con aquel que fui. Por ejemplo en esta imagen puedo reconocer claramente los días finales de un viejo yo. Por supuesto que en ese momento no tenía la más remota idea de que lo fueran, sobre todo considerando la mística que había rodeado a ese viaje, las charlas con Esperanza, etc. Sin embargo así fue. Entre otras cosas, llevaba en mi mochila dos compañeras de ruta que afortunadamente hoy ya no me acompañan. Una, mis ideas de izquierda. La otra, una total falta de claridad con respecto a qué hacer con mi vida.
 

12 comentarios:

Julián dijo...

Recordé este viaje porque justamente hace pocos días estuvimos hablando de eso con Esperanza.

Julián dijo...

El segundo punto es, en apariencia, paradójico, considerando que acababa de graduarme como abogado. Pero como el graduado de la película (Hoffman) me sentía existencialmente asfixiado y con la impresión de que mi vida tenía que tomar un nuevo rumbo. Claro que no sabía cuál, lo que era en cierto modo terrible.

Sk dijo...

Yo aún no he conseguido encontrar mi camino. A veces pienso que nunca seré capaz.

Por otra parte, yo no veo ningún Esperanza. Solo veo un moreno de ojazos claros.

Se te ve muy delgao en esa foto.

Julián dijo...

Yo lo encontré, pero cuidado, que eso no quiere decir que haya llegado a destino.

Julián dijo...

Sk, lamentablemente no heredé los ojos verdes de mi madre, asique los ojazos claros que ves son ilusorios. Digo lamentablemente porque habrían sido una excelente combinación con mi color de pelo y mis ojos rodeados de cejas tupidas y pestañas largas. En fin...

En cuanto a delgado, ahora estoy más flaco...

Julián dijo...

Me gusta mucho esta foto.
Veníamos bajando uno de los cerros y me llamó la atención el frente de la casa y la puerta larga y pintada de amarillo. Le dije a Esperanza: "saquémosnos una foto acá" y el Gato disparó. Esa fue toda nuestra relación con la casa roja. Tenía una gran atmósfera esa ciudad. De noche era directamente mágica.

Sk dijo...

No tienes los ojos claros? Pues tengo la idea fijada de que tus ojos son verde claro. Así te veo.

Julián dijo...

No. Mi mamá tiene los ojos verde claro, y lamentablemente no tuvo la amabilidad de transmitírmelos.

Sk dijo...

De todas maneras, lo tuyo son ojazos. Tener los ojos grandes y con pestañas largas es un lujo, tengas luego el color que tengas.

Julián dijo...

jejeje
gracias, sk.

Julián dijo...

hablando de ojos, yo muchas veces me he topado con mujeres que tienen unos ojos que te caés de culo, y no precisamente porque sean claros. sí por la forma, el tamaño, las cejas, pestañas, profundidad de la mirada, etc. hay mucho en juego con los ojos. eso al margen de que me habría gustado tener los ojos verdes de mi madre, lo reconozco.

Loon dijo...

Si en ese entonces todavía tenias ideas de izquierda, claramente no tenias en claro que hacer con tu vida.

El Dandy