Uno sabe que empieza a tocar bien la guitarra cuando las manos bailan. Es así de sencillo.
Creo que no es exagerado llamar a este tiempo "la era del narcisismo", ¿no?
No deja de maravillarme el impacto inmediato que tiene el simple hecho de creer que uno es capaz de hacer algo. De verdad. Me impresiona. Finalmente, uno no es otra cosa que el resultado de lo que ha creído poder ser a lo largo de una vida.
Nunca seas el pequeño insecto que necesita alimentar su autoestima destruyendo la de todos los que lo rodean.
La razón gana batallas. La emoción gana guerras.
Dicen que la figura del padre muerto se agiganta con el paso de los años.
En mi caso, por el contrario, lo único que se agiganta es su declinación.